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- El "Telefónica negro" volvía esta madruga al agua para comenzar en breve con los primeros entrenamientos en Río
EL “TELEFÓNICA AZUL”, MÁS CERCA DE RÍO DE JANEIRO
Río de Janeiro (Brasil), 27 de marzo de 2009
Desde que salieron del sistema de altas presiones, la tripulación del “Telefónica azul” no ha dejado de pensar en la llegada a Río de Janeiro (Brasil); y es que según los últimos partes de posiciones el barco español cruzará la línea de llegada mañana sábado a partir de las seis de la tarde (hora española). El proa del ESP-12 David Vera explicaba el cambio de condiciones vividas al bordo del Telefónica azul”: “Por fin ha llegado el tan esperado viento y vamos a buen paso hacia Río de Janeiro”. El canario continuaba su relato mostrando la mejor de sus caras, y así afirmaba : “Si no fuera porque sabemos que llegaremos en pocas horas, ¡nos iríamos directamente a Boston!”.
Después de 42 días de competición, el “Telefónica azul” afronta las últimas millas de una etapa extremadamente larga. Quedan 377 millas (698 kilómetros) para que el barco de Íker Martínez y Bouwe Bekking cruce la línea de llegada de la quinta etapa de la Volvo Ocean Race situada en la Bahía de Guanabara. A una velocidad de 15 nudos con puntas de 19, en el barco español empiezan a echar la vista atrás y así el vasco Xabi Fernández apuntaba: “Creo que de esta etapa me acordaré mucho, pero no de momentos concretos sino de la etapa en sí. Han sido 43 ó 44 días en el mar y creo que hemos vivido muchos más momentos buenos que malos, en el Océano Sur hemos tenido suerte ya que no hemos tenido condiciones muy malas, lo cual es bueno porque si te tocan diez o 15 días de mal tiempo tienes muchas probabilidades de que surjan problemas y, como siempre, me quedaré con los momentos buenos que hemos pasado, con la buena navegación con viento y con el Cabo de Hornos… Ha sido una experiencia, han sido 12.500 millas”.
Sin duda, estos últimos días son los más duros para los tripulantes, y es que tal y como puntualizaba David Vera: “En los últimos días de regata lo pasas mal porque sabes que estás cerca de tierra, cuentas los días, las horas, los minutos… Y se hace largo. Cuando sabes que te falta mucho no piensas en llegar, simplemente te centras en llevar el barco lo mejor posible”.
Mientras el “Telefónica azul” continúa su navegación, ahora con buenos vientos, el barco chino-irlandés “Green Dragon” ha optado por el modo invisible, desapareciendo del mapa a las 11:00 horas en España. No será hasta mañana a esa misma hora cuándo sepamos qué han decidido los de Ian Walker, a menos que se coloquen a menos de 50 millas de la costa… Visto lo visto, no cabe duda: a bordo del “Telefónica azul” el ritmo no para.
Un guiño a las familias
Desde el paso por Cabo de Hornos, los tripulantes del “Telefónica azul” han querido agradecer a sus familias el inmenso apoyo que les ofrecen a la hora de subirse a un Volvo Open 70 y disputar la Volvo Ocean Race.Hoy ha sido el turno de David Vera y Xabi Fernández, proa y trimmer del “Telefónica azul” respectivamente. El primero de ellos fue conciso al afirmar que “lo que más he echado de menos estos días ha sido la familia, para ellos esta vuelta es más dura que para nosotros”.El vasco Xabi Fernández hacía referencia a los últimos ocho años “de locura” que ha vivido, y así explicaba: “Para nosotros es fácil hacer esta regata porque al final estamos haciendo lo que nos gusta. La gente que lo ve desde fuera siempre dice: ‘¡Qué duro!’, y por supuesto que hay momentos muy duros, pero en el fondo estás haciendo lo que quieres, lo que nos gusta. Está muy bien. La contrapartida es que en lo que llevamos de 2009 hemos estado tan sólo siete días con la familia, y ya llevamos tres meses en este nuevo año… De aquí a junio va a seguir siendo así, y esa es la peor parte, sobre todo para ellos, para las familias, que son quiénes están en casa esperándote”.
El “Telefónica negro” vuelve al agua
Por su parte, el “Telefónica negro” ha vuelto al agua en Río de Janeiro. Después de varias semanas, el barco que patronea el campeón olímpico Fernando Echávarri volvía en la tarde de ayer en Brasil (madrugada en España) a estar de nuevo en el agua.
Miembros de la tripulación y el equipo de tierra, daban ayer las últimas pinceladas sobre el ESP-11 para que por fin pudiese tocar el agua una vez más. “Estamos listos”, comentaba Echávarri. “Hoy trabajaremos en el barco para llevar a cabo los últimos retoques y esperamos entre hoy y mañana poder hacer el primer entrenamiento en el agua”.
Mientras tanto, la tripulación del “Telefónica negro” mantiene en Río su rutina de entrenamiento, comenzando muy pronto por la mañana en el gimnasio. “Hay que volver a coger la rutina de trabajo en tierra, durante las paradas, cuanto antes y eso es lo que estamos haciendo. Sin duda, volvemos con más ganas que nunca”, concluía Echávarri.
