Foto copyright Rick Tomlinson/Volvo Ocean Race
Foto copyright Rick Tomlinson/Volvo Ocean Race
LA FLOTA LLEGA A CIUDAD DEL CABO
La suma de puntos (8,7,6,5…1) de esta primera etapa, que se acumulan a los de la regata costera de Alicante y la meta volante de Fernando de Noronha, ya tiene los puestos confirmados, salvo imprevisibles contratiempos de última hora.
Con la llegada del telefónica Azul, ya son cinco los equipos que han completado las 6.500 millas entre Alicante y Ciudad del Cabo. El barco español no pudo culminar la recuperación que inició en la primera parte del recorrido, tras su obligada parada en Algeciras debido a una avería de su sistema de gobierno. La parada técnica, que el reglamento requiere que sea de al menos 12 horas, les obligó a navegar contrarreloj en su afán por volver a meterse en la pelea. Algo que consiguieron en la aproximación a la zona de calmas ecuatoriales, pero su estrategia de atravesarlas más al Este que los barcos líderes le supuso un retraso insalvable en Fernando de Noronha, incrementado más tarde cuando comenzaron las condiciones de viento fuerte y mar dantesco. Pepe Ribes comentó al llegar a tierra: “El principio de etapa fue muy duro cuando tuvimos que parar. Pensamos que nos los volveríamos a coger, pero lo hicimos. Estuvimos cerca de ellos, viéndolos y después en nuestra opción más al Este en la zona de calmas ecuatoriales no fue beneficiosa. Luego, cuando entró viento lo intentamos todo pero no pudimos navegara la misma velocidad que ellos. Con 30 nudos de popa no podemos con los dos Ericsson, el Puma y el Green Dragon”. Por su parte, Jordi Calafat compartía sus inquietudes: “Ha sido un poco frustrante porque en ciertas condiciones no podíamos hacer más. Hay que analizarlo, ver como podemos mejorar y recordar que no toda la Volvo Ocean Race es en popa con viento y mar”.
El Team Russia, equipo en el que Guillermo Altadill ha navegado esta etapa como jefe de una de las dos guardias, no estuvo muy acertado con su estrategia ni tampoco han navegado tan veloz como los barcos que han dominado la etapa. Su ataque de la zona de calmas ecuatoriales muy al Este primero, y luego su ruta más Oeste ganando sur tras pasar la meta volante les retrasó al último puesto, que pacientemente pudieron mejorar tras superar al Delta Lloyd y a los problemas del Telefónica Negro. El navegante oceánico español resumía su actuación: ”“La verdad es que la segunda parte de la etapa ha sido mucho más divertida que la primera, entre otras cosas porque el barco con poco viento no defiende y en cambio con vientos fuertes va muy bien”. Preguntado por si habían sufrido los mismos problemas que sus rivales a la hora de navegar el barco con viento, Guillermo comentaba: “ah, que los demás también han tenido problemas para que no se les pinchara en barco con las olas?, pensé que solo habíamos sido nosotros y era un problema nuestro –comenta riendo-.La verdad es que estos barcos son muy difíciles de llevar con mucho viento y ola, más que los de la primera generación. En la pasada edición, quitábamos trapo mucho antes pero como ahora aguantamos más superficie vélica que anteriormente el resultado es que pinchamos más las olas”. ” . Faltan dos barcos por cruzar la línea de llegada de Ciudad del Cabo. El Delta Lloyd que se encontraba en el último parte de posiciones a 85 millas de la capital Sudafricana será el séptimo barco en hacerlo durante la próxima madrugada, mientras que el Telefónica Negro, que navegaba a xxx millas de la meta se espera pueda hacerlo mañana por la tarde o primeras horas de la noche, tal y como estimaba esta mañana su patrón Fernando Echávarri:” Nuestro objetivo es llegar lo antes posible y que nuestro equipo esté preparado en tierra para solventar las averías de cara a la siguiente etapa. Teníamos una estimación de llegada para mañana martes después de mediodía, pero el viento ha calmado un poco y nos retrasará unas horas”.
La hazaña del Ericsson 4
El equipo sueco ha dominado de pies a cabeza esta etapa, haciendo valer su conocimiento del barco fruto de su largo periodo de pruebas y entrenamientos. Haber tenido que desembarcar aun tripulante en Cabo Verde les supuso un alto coste, tanto en unas preciosas horas para desviarse y completar la maniobra, como en desgaste físico al quedar con un tripulante menos durante más de dos semanas. Su buen hacer durante las fuertes tormentas de la pasada semana le permitieron deshacerse del norteamericano Puma, que vendió muy cara su derrota. La proximidad con la que ambos navegaban, permaneciendo a la vista durante muchos días, obligó al Ericsson 4 a exprimir al máximo su barco, encadenando consecutivamente varios records de distancia navegada en 24 horas, hasta fijar la marca en 602,66 millas, sorprendiendo sobremanera que fueran capaces de navegar a un ritmo desenfrenado a lo largo de casi 3 días. Su patrón Torben Grael comentaba tras su llegada a tierra: “Fue muy larga la primera fase de la etapa, porque la zona de calmas ecuatoriales era muy grande y nos costó pasar. Por el contrario, la segunda parte fue bastante rápida. Hicimos el récord, pero navegamos muy rápidos durante más de dos días. Al final estábamos muy cansados. Haber estado compitiendo tan estrechamente con el Puma fue decisivo, tuvo mucha importancia en el récord. Sí miramos la pasada edición, el ABN AMBRO One tenía mucha ventaja, y en condiciones límite podía levantar el pie del acelerador. Aquí sabíamos que todos estaban muy cerquita, y había que tirar fuerte, si no querías que te pasaran. Es difícil comparar lo que representa esta victoria de una etapa con otros éxitos de mi carrera”. Su compatriota brasileño Horacio Carabelli resumía su experiencia:”En la primera mitad de etapa todo va bien, pero luego uno ya quiere llegar. Ha sido todo muy positivo. Lo de Toni fue un momento difícil, pues no sólo perdimos unas millas para desembarcarlo si no que pasamos a tener un tripulantes menos. Haber conseguido llegar segundos en Fernando de Noronha fue muy importante para la tripulación. Luego luchamos con el Puma y se dieron las condiciones para batir el record. Siempre que estás en esa situación, de casi un match race tratas de sacar ventaja. Parecía que estábamos amarrados con una elástico, nos íbamos acercando y separando, sin perdernos de vista. Valió la pena, fue muy bueno”.
Además del siempre efímero honor de poseer un record, la recompensa del Ericsson 4 ha sido liderar la Clasificación de la Volvo Ocean Race tras la primera etapa, luego del quíntuple a puntos registrado al acumular los puntos de la regata costera de Alicante y de la primera meta volante de esta Volvo. Pero si la escasa diferencia de puntos es evidente, el hecho de que esto apenas haya comenzado promete reacciones de sus rivales y muchas emociones reflejadas en la clasificación por puntos.
1- Ericsson 4: 21 días, 17 horas, 54 minutos
Clasificación Volvo Ocean Race
1-Ericsson 4, 14 puntos
A falta se sumar 1 punto de etapa (++) Aplicadas las penalizaciones (+++) A falta de sumar 2 puntos de etapa