Foto copyright Jaques Vapillon
Fuente info Istanbul Europa Race
A 150 millas del veredicto de Brest
lunes, 21 de septiembre de 2009
Tras dejar la puerta de la punta de Bretaña por popa durante la noche, los cuatro primeros participantes de la última etapa de la Istanbul Europa Race se dirigen al faro de Wolf Rock con muchos bordos. Con un viento del oestenoroeste de 5 a 10 nudos, Michel Desjoyeaux y sus hombres mantienen el liderato, por delante de la tripulación de Roland Jourdain. Con una ventaja de casi 20 millas sobre el Veolia Environnement, el Foncia consolida su liderato sin prisas pero sin pausas, mientras se acerca a la Cornualles inglesa. El epílogo de este acto entre Barcelona y Brest debería llegar en unas pocas horas, pero a menos de 150 millas de la línea de llegada en la ciudad del Ponant, entre grandes mareas y la negociación de una dorsal, el suspense se mantendrá hasta el final.
Si la flota de los seis monocascos Imoca de la Istanbul Europa Race nunca ha estado tan próxima al final de esta última etapa, es obligado confesar que parece gustarle mantener el misterio en cuanto a su desenlace. Si bien Michel Desjoyeaux y los tripulantes del Foncia hace varios días que se colocaron en cabeza al sur de España, Roland Jourdain y sus «felices» comparsas no bajan los brazos y mantienen al líder en su punto de mira. Los participantes deben negociar ahora una dorsal situada en su ruta, con vientos de proa y fuertes corrientes. La dificultad para los navegantes consistirá en lograr una buena posición para abordar Wolf Rock sin salir esquilmados. ¡De ello depende su sonrisa al llegar a Brest!
El 1876, retenido en España
Tampoco hay tregua en la banda de los dos perseguidores formada por el Groupe Bel y el Paprec Virbac 2. Con un retraso de unas 40 millas respecto de la cabeza de la flota, Kito de Pavant y Jean-Pierre Dick prosiguen su ruta común y sólo los separan cinco millas escasas, una nadería en una etapa de 1.668 millas. En la mañana de este lunes es difícil imaginar que la lucha no se mantendrá hasta los últimos metros. Finalmente, en la cola del pelotón, el castigo sigue aumentando, con el 1876 debatiéndose con un viento de proa en el noroeste de España. Seguro que a los españoles les hubiera gustado dejar atrás su país mucho antes. Marc Thiercelin y sus hombres no han entrado aún en el golfo de Vizcaya y tendrán que luchar en él cuando los primeros ya disfruten del descanso en tierra. Dentro de unas horas llegará el veredicto final para la flota de la Istanbul Europa Race...
