Juanpa Cadario: De Puerto Month a Calbuco, primera etapa de Chiloe 2008

De Puerto Month a Calbuco, primera etapa de Chiloe 2008

Reporte del diario La Tercera de Chile

La sorpresa reinó en la primera jornada de la Regata de Chiloé 2008, que se disputó hoy entre Puerto Montt y Calbuco, pues el primero en llegar a la meta fue el yate debutante Claro, de la categoría IMS Blanca, confirmando que la competencia austral suele romper con lo esperado.
En segundo lugar arribó la embarcación Movistar, a 1,06 segundos del ganador, mientras que los escolta fueron el yate Stella Artois y Volvo, quienes arribaron a 1,40" y 2.09", respectivamente, del ganador. Todas estas embarcaciones de la categoría IMS Blanca, la más importante de la competencia.
El único representante de la serie IMS Azul que se ubicó entre los primeros cinco puestos fue Ericsson, que cruzó la meta a 2,55 segundos.
Mañana sigue la competencia con su segunda etapa, que se desarrollará entre Calbuco y Quemchi.


Reporte del diario El Mercurio online

Claro lidera la rebelión de los pequeños

El yate de Dag von Appen regala varios metros de eslora. Pero ayer le sacó partido a eso y superó a los monstruos de la IMS Blanca: el Movistar y el Stella Artois.

HÉCTOR OPAZO M.Enviado especial a Calbuco

Es juguetona la regata chilota. Pasa de vientos medianos a calma máxima. De corrientes poderosas a tazas de leche. Por lo mismo, hasta las más firmes candidaturas se pueden ir a pique.Algo de eso tuvo la primera patita de la X Regata de Chiloé. Partió con suave brisa, que poco a poco fue creciendo, hasta llegar a cerca de 10 nudos. Los grandes, los favoritos, los monstruos sacaron ventajas. Y el esperado duelo de los favoritos - Movistar, Banco Edwards-Citi y Stella Artois- se olía desde lejos.Sin embargo, el paso Tautil, ya llegando a Calbuco, desplomó todo. Eolo se tomó la tarde libre, dejó de soplar y los yates más grandes se estacionaron muy cerca de la línea imaginaria que marca la meta. Los más pequeños, que habían cedido harta distancia, se acercaron. Y atacaron. No les alcanzó a todos, pero el Claro, de Dag von Appen, timbró la oferta: pese a que llegó tres minutos después del Stella Artois, de Nicolás Ibáñez -cinta azul ayer-, se ajustó a la exactitud matemática del hándicap para atrapar el triunfo en el primer track, justo cuando la flota ya apuntaba a Chiloé."Sí, claro que nos sirvió hoy (ayer) tener un yate más chico, pero también puede llegar a complicarnos más adelante", dijo Von Appen.
Los grandes apuntaron sus dardos a Eolo. "Veníamos dominando la prueba, pero al llegar acá mismo se acabó el viento y los más chicos lo aprovecharon", afirmó Javier Conte, táctico del Banco Edwards-Citi.